El uniforme laboral no es un tipo de prenda que una empresa imponga porque si, sino que actúa como un elemento de protección ante los diferentes riesgos que pueda presentar un empleado en su puesto de trabajo. Al mismo tiempo, sirve para que los empleados se puedan sentir identificados con la empresa y para darles la máxima comodidad a la hora de gestionar sus funciones.
Por ello, es de vital importancia adaptar el uniforme al periodo del año en el que nos encontremos, a la climatología.
Imagina el caso de un reponedor que gestiona su trabajo en invierno y en verano. La ropa de invierno puede ser muy calurosa para el verano, mientras que no se puede poner una prenda demasiado fresca en invierno, ya que se podría resfriar.
¿Cómo preparar el uniforme laboral de cara al verano?
Tejido
Uno de los factores más importantes que habrá que considerar. Como la temperatura es alta, lo más recomendable es decantarnos por tejidos transpirables, como puede ser el algodón. Así se evitará que el empleado sude en exceso y al mismo tiempo que esté cómodo mientras gestiona sus tareas.
Tipo
El tipo de uniforme es otro criterio que no tendremos que descuidar. Hay uniformes que constan de traje y camisa, puede ser un vestido, camiseta de manga corta, mono de trabajo. Dependiendo de la temperatura y del tipo de trabajo, se elegirá una u otra opción.
Color
Muchos lugares de trabajo también cambian el color del uniforme cuando llega el verano. La razón de ello es que el verano pide unos colores más alegres y llamativos. Sin embargo, no se puede elegir el primer color que se nos ocurra, sino que debe de trabajar en sintonía con la imagen de marca de la empresa.
Accesorios y complementos
Nos estamos refiriendo a elementos como pajaritas, estampados florales o accesorios variados. Pueden ponerle un punto de color adicional al uniforme.
Calzado
Y por supuesto, el calzado no se debe descuidar. Tal y como ocurría con las prendas, el calzado debería ser transpirable para evitar que los pies puedan sudar de forma excesiva. Esto es muy importante, sobre todo cuando estamos hablando de puestos de trabajo en los que los empleados tienen que pasar mucho tiempo en pie.
Con estas claves podrás preparar el uniforme de cara al próximo verano.